Alcanzar el bienestar y la sana convivencia en todos nuestros espacios (hogar, aula de clases, colegio, trabajo, barrio y sociedad), nos compromete a la participación, reflexión y sensibilidad por este tema. Los integrantes de las familias y de la comunidad educativa, debemos conocer nuestras motivaciones, habilidades, emociones, conocimientos, fortalezas, debilidades, ideales, sueños, gustos y disgustos, para lograr la construcción colectiva de bienestar familiar y sana convivencia.
Compartir información nos ayuda a prosperar…
Experiencias, necesidades y opiniones
Alcanzar el bienestar de todas las familias, requiere la participación activa de todos.
Compartir “experiencias” que pueden apoyar a otras familias; compartir “necesidades” para encontrar soluciones a las problemáticas familiares y de la comunidad; compartir “opiniones” para diseñar las acciones más acertadas.